miércoles, 19 de diciembre de 2007

Sin poema me quedo.

Si no puedo pensar,
nada puedo inventar,
con este dilema me tendré que quedar,
pues de clase me voy a tener que marchar.

¿Que hago?

No sé que hacer,
no sé que fabricar,
no sé que dibujar,
así que voy a terminar.

Espera aun no acabé,
dos estrofas debo hacer,
así no quedaré
como un soso al nacer.

La marimorena

En el portal de Belén hay estrellas, sol y luna
la Virgen y San José, y el Niño que está en la cuna

Ande, ande, ande La Marimorena
Ande, ande que es la Nochebuena

Y si quieres comprar pan más blanco que la azucena
en el portal de Belén la Virgen es panadera

Ande, ande, ande La Marimorena
Ande, ande que es la Nochebuena

Un pastor comiendo sopas en el aire divisó
un ángel que le decía ha nacido el Redentor

Ande, ande, ande La Marimorena
Ande, ande que es la Nochebuena

De Oriente salen tres Reyes para adorar al Dios Niño
una estrella les guiaba para seguir el camino.

Ande, ande, ande La Marimorena
Ande, ande que es la Nochebuena

A esta puerta hemos llegado
cuatrocientos en cuadrilla
si quieres que nos sentemos
saca cuatrocientas sillas

Ande, ande, ande La Marimorena
Ande, ande que es la Nochebuena

Saca una para mi
y otra "pa" mi compañero
y los que vengan detrás
que se sienten en el suelo

Ande, ande, ande La Marimorena
Ande, ande que es la Nochebuena

En el portal de Belénhan entrado los ratones
y al bueno de San Joséle han roido los calzones

Ande, ande, ande La Marimorena
Ande, ande que es la Nochebuena

En el Portal de Belén hay un hombre haciendo gachas
con la cuchara en la mano repartiendo a las muchachas

Ande, ande, ande La Marimorena
Ande, ande que es la Nochebuena

Una estrella se ha perdido y en el cielo no aparece,
se ha metido en el Portal y en Su rostro resplandece.

Ande, ande, ande La Marimorena
Ande, ande que es la Nochebuena

En el Portal de Belén hacen Luna los pastores
para calentar al niño que ha nacido entre las flores.

Ande, ande, ande La Marimorena
Ande, ande que es la Nochebuena

Ande, ande, ande La Marimorena
Ande, ande que es la Nochebuena

La mina encantada

Había una vez un pueblo llamado Jikar,este pueblo era muy pobre debido, a que hace un año, una guerra arrasó el pueblo.
En ese pueblo vivía una niña llamada Ana,con su hermano Juan y su madre Iria.Su padre murió en la guerra, a causa de un disparo en la cabeza.
Un día Ana se fue a pasear con su hermano al Monte del Condenado.Cuando llegaron al lugar accesible más alto del monte Juan se calló por un agujero, entonces Ana se tiro para ayudarle entonces encontraron una mina de oro antigua.
Juan corrió a ver si era verdad que aquel oro era de verdad.
Entonces cogió un montón y se lo llevó a su hermana,después encontraron una salida y llevaron unos calderos al pueblo.
Al llegar al pueblo su madre le comunico al alcalde lo que había sucedido.
Y un año mas tarde se volvieron ricos al explotar la mina.
Y la familia de Ana vivió feliz como el resto del pueblo.

de alli a dos años apareció un hombre en su casa.Cuando la madre fue ha abrir se encontró al padre de Ana es decir su marido.
el les contó lo que le había sucedido.
Le habían raptado unos soldados enemigos, y que el comandante, les dijera que le habían dado un balazo en la cabeza para que no supieran lo que pasó realmente.
Pasado un año Ana tubo un hermano y una hermana.Paco y Yaiza.

viernes, 14 de diciembre de 2007

Perdón

Que pronto me olvidaste
sabes que te daría mi corazón,
que pronto te cansaste
ya se que soy cabezón,
sin ti, mi vida, perderé la razón.

El mar

El mar,
pacifico,
silencioso,
azul color de cielo,
trae con sigo botellas
hasta nuestra costa,
costa preciosa,
costa hermosa,
en la que el viento daba
y movia las olas
como a cualquier mariposa.

Ojala pudiera confesarte lo que siento,
pero es que no puedo.
Sería perderte del todo.
Como siempre me quedaré en silencio
viendote con ella, doliendome por dentro,
matandome por fuera, ya no siento tu aliento.
¿Cómo puedo decirte que te quiero?
¿Cómo puedo perder mi miedo?
¿Cómo es que después de tanto tiempo te sigo queriendo?
Tú tan inocente, que no sabes lo que siento...

Roba el coche

Roba el coche verde,
roba el coche de enfrente,
roba el coche del vecino,
roba el coche y vete.

El balón mágico

Érase una vez un niño llamado Darío , le gustaba jugar mucho al fútbol y estaba en un equipo . Pero los compañeros de Darío siempre se metían con el, por que nunca marcara un gol. Un día decidío ir al campo el solo a practicar por que el sábado tenían un partido muy importante. Darío se puso a jugar, hasta que se cansó y decidió descansar un rato debajo de un árbol .
Cuando se levantó miro un balón, lo fué a goger y decidión jugar con el, cuando Darío estaba a punto de darle una patada, sonó una vocecilla:
- ¡ No me agas daño por favor!
Darío quedó sorprendido, se preguntó se preguntó de donde salían esa voz.
- ¡Estoy aquí, soy yo el da abajo, me tienes a tus pies!
¡¿ Un balón que hablaba?!que raro-pensó.
-Tranquilo no te haré daño si tu me lo pides.- le dijo Darío
De todas formas te concederé un deseo por tu generosidad, dijo el balón
¿Que desea niño?
Pues desearia que mañana ganáramos el partido y que yo marcara un gol.
-Pues así será- dijo el balón.
-Pero ¿como podrás acer eso?- dijo Darío.
Yo soy el rei de todos los balones y lo que diga yo se cumple.
Darío le dió las gracias y dejó el balón donde lo había encontrado.
Llegá el día del partido.
Solo quedan veinte minutos para acabar el partido y los dos equipos están empatados.
El partido esta muy interesante. ¿quien ganará?
Hay un penalti y la toca tirar a Darío. Darío tira y ............

Te quiero y te odio

Creyendo quererte, queriendote olvidar
sintiendo perderte, aliviandome por tu ausencia.
Viendote con ella, doliéndome por dentro
matándome por fuera, ya no siento tu aliento.
Sintiendo que te quiero, pensando que te odio
queriendo olvidarte, sabiendo que no puedo.
Olvidando lo que siento, callandome mis pensamientos
lo mio siempre quedará en silencio.
Nunca aré lo que pienso, nunca tendré lo que quiero
nunca más volveré a soñar, nunca volveré en ti a pensar.

Yo

Yo te tenía como algo
que pensaba que no te ivas,
como algo que estaría conmigo
hasta el fin de mis días,
pero de repente
te fuiste
y me dejaste al descubierto
sin acompañarme en mis lamentos
ni ayudarme en los problemas.
Más tarde como nada
dejaste tú orgullo atras
y me dejaste rebosando de alegria
por solo una palabra que dijiste.
Ahora ya pasó tiempo de eso
pero siento que te estoy perdiendo
a medida que va pasando el tiempo.

Novios

Fuiste el primero
pero no el único,
te quise más que a todos
aunque no lo creíste,
cortaste con migo
por que no te daba nada,
aunque nunca imaginaste
que aun te amaba.

Se fue

Hasta que se fue
no me había dado cuenta
de lo que era para mí.
Solo sé que a ella le
gustaría que yo fuera feliz.

Mi primo

Sin mi primo hay mucha soledad.
Quiero que venga pronto,
quiero que no se vaya,
al menos por una temporada.

La furia del mar

El mar estaba enfadado, enfurecido,
con sus ondas como manos,
inudaba los alrededores de la playa,
inundaba casas y caminos.

Mañana

Mañana es el día en que te veo,
mañana es el día en que te encuentro de nuevo,
mañana es el día en que me muero por ti y añoro tus besos,
mañana es el día en que los dos aprendemos
a ser uno en nuestros sueños.
Mañana te voi a querer más que siempre
mañana no te voi aperder más que siempre.

miércoles, 12 de diciembre de 2007

Cosas que pasan

Este cuento sucedió en Parranda city.
A todos los que vivían en ese pueblo lee gustaba mucho la parranda y, nunca nadie estaba triste.
Un día Antonio y Jonás estaban planeando la próxima fiesta que había. Tenían muchas ganas de fiesta.
-Antonio, este año tiene que ser especial.
-Vaya, este año tenemos que beber como leónes.
-Jajaja.
-Jojojo.
Ellos siempre estaban de cachondeo y de buen royo.
Llegó el día de la fiesta y estaban todos muy nerviosos, sobre todo, Antonio y Jonás.
Y por la noche y empezo la fiesta. Estaban todos felices porque era la fiesta de la ciudad.
Todos bailaban con la orquesta. Tocaba el grupo de Ipólito, un amigo de nuestros dos protagonistas. Ya por la madrugada Antonio cayó al suelo y, todos asustados fueron a ver lo que pasaba.
Jonás lo llevó al hospital y, al día siguiente Antonio se levantó y le dijo a Jonás que no volvería a beber más.
Desde aquella todo el pueblo cogió sentido y se moderaron en sus fiestas.

Un gran susto

Un día, hace 2 años como mucho estaba muy aburrida en casa. De pronto me llama una amiga mia llamada Andrea para decirme que estaba invitada a su cumpleaños, yo encantada acepté pero es que el problema es que era ese mismo día y aparte de noche.
Fuí corriendo a junto de mi madre a ver si me dejaba y ella confiando en mi me dejó ir pero que viniera pronto para casa.
Como aún faltaban unas horas pues fui a comprarle un el regalo y lla sabia lo que lñe iba a comprar: un bolso de perlitas blancas rojo. Ya lo tenia pensado asi que no tardaría mucho en venir de las tiendas. Llegué a casa rápido con el regalo y solo faltaban una hora asi que ya me iba a ir hacia su casa ya era de noche, pronto llegué as su casa y había mucha gente y mucho ruído, estuve unos minuto s ypronto me fuí porque me dolía la cabeza me despedí de todos y lla salí pero aun que me fuera pronto era ya de noche, empece a correr porque tenía miedo pero de repente escuche uno pasos que venian detrás mia yaún corría más pero los pasos me alcanzabanme metí por los callejones y cojí el mobil para llamar a mi madre y que me viniera a buscar pero no había covertura, todo eso no me lo podía creer... ya pensé que ese día era el último y de repente me coje una mano intenté gritar pero no podía...
-¡ Hola amiga!
-AHHH! Eres tú Andrea menudo susto.
-Jeje... esque te olvidaste este regalo.
Parva ese regalo es para ti.

El sueño de Fran

Érase una vez, un niño llamado Fran. Fran solía navegar en un barco con su padre todos los fines de semana. Hasta que un día, estando navegando, su barco se quedo sin gasoil.
Pasadas dos horas, emgrapezó a desatarse una gran tormenta, y cuanto más tiempo pasaba, más grandeseran las olas, (de hasta diez metros).
Fran tenía mucho miedo e intentaba coger a su padre del brazo, pero era imposible, el continuo movimiento de las olas, apenas le dejaba moverse. Derrepente, el barco se partió en dos, y Fran logro saltar de el, pero el padre no.
A la mañana siguiente, no se sabe como, pero Fran apareció en una isla aparentemente desierta.
Él tenía mucha hambre y no sabía que hacer. Émpezo a andar por toda la isla. Subió, bajó, volvió a subir... pero nada, no encontraba nada por ninguna parte.
Hasta que... a su derecha encontró un árbol lleno de plátanos, peras, manzanas, cocos, naranjas...
¡Pero que estaba viendo!, ¡era un árbol mágico!. Fran comió hasta que no pudo más.
Luego pensó que ya que iba a dormir allí, debería hacer una cabaña.
Así fué, consiguió un par de piedras afiladas, y se dispuso a talar un árbol.
Le dió un golpe con la piedra, y... ¡ ZAS !, ¡ increible!, eñ árbol cayó de un solo golpe. Aquellas piedras también era mágicas.
Después de talar un par de árboles fué a buscar algunas lianas para atar la madera, y también unas ramas de palmera para usar de tejado.
Lo junto todo en la parte derecha de la playa para hacerla allí, y de forma inexplicable, la cabaña se empezó a hacer sola, sin tener que mover ni un solo pedazo de madera, ¡ Alucinante !, dijo Fran. ¡ Menuda cabaña !, ¡ ha quedado impecable !.
Fran sabía que aquella isla tenía algo especial pero no sabía el que. Así que se puso a investigar toda la isla.
Comenzo por adentrarse en el bosque, caminando sin parar.
Media hora más tarde se encontró con un agujero en el suelo, del que salía una voz pero no lograba escuchar lo que decía. A medida que iba bajando había más claridad, que raro, debería ser al contrario, pero siguió bajando, y esa voz le sonaba muchísimo.
Ahora la escuchaba perfectamente, y le decía, Fran, despierta, vamos, que hay que ir al cole.
Y Fran se despertó de su fabuloso sueño.
A partir de aquel día decidió no ir nuca más en un barco.
Afortunadamente se quedó todo en un sueño.

F I N

La luna

La luna está en el cielo,
la luna está en el mar,
la luna me quiere tanto,
que nunca me va a abandonar.

Las estrellas la acompañan
iluminan su camino.
Las estrellas la acompañan
sin saber su destino.

La oscuridad la favorece,
ya que de la claridad escapa
y cuando el sol sale,
ella siempre se tapa.

La luna a veces se esconde,
la luna a veces da la cara,
a veces está contenta,
a veces está enfadada.

viernes, 7 de diciembre de 2007

El río

Joven río, alegre río,
bajas desde tu lecho
con agilidad, soltura y brío.
Sorteas grandes pendientes
hasta que se calme la corriente.

Adulto río, manso río,
tu cauce crece
cuando te acompañan afluentes.
Atrás dejas las grandes montañas,
delante, a lo lejos, el mar.

Viejo río, cansado río,
perezosamente te deslizas
con poca fuerza, desganado,
débil, entregado,
y llegas al mar, tu fin.

Mi redondilla

Mi profe me manda obrar
una feliz redondilla
que para nada es sencilla
y acabo de realizar.

El invierno

En la mañana blanca,
en la mañana fría,
el cantar de los pájaros
ya no se oía.

Empezaba un invierno
en el que por las ventanas
la gente veía
las montañas nevadas.

Las copas de los árboles nevadas,
los ríos de los valles helados.
El cielo azul, despejado
y solo el vento
recorría el prado.

Mi vida sin ti

Todo está triste
desde que me abandonaste,
los días no son los mismos
desde que te fuiste.

Aunque no sepa como,
quiero olvidarte
porque se que jamás
volveré a abrazarte.

miércoles, 5 de diciembre de 2007

Egipto, año a.C (Imperio Medio. Invasión de los hicsos). Llevó su mano hacia el carcaj para coger una nueva flecha y la puso en el arco, tensándolo para disparar. La flecha silbó en el aire y llegó a su objetivo, el cuerpo de un soldado de los hicsos, unos metros más allá. Sonrió al conductor de su carro de combate y le señaló que se dirigiese a la zona Noreste de la batalla para ayudar a contener el intento de invasión. Apenas hacía una media hora que la batalla había comenzado, pero ya estaban teniendo problemas en los dos bandos. Chasqueó la lengua con molestia y se preparó para disparar de nuevo, cerciorándose de que su espada se encontrase a un lado del carro en caso de tener que luchar de ese modo. Volvió a coger la cuerda del arco entre sus dedos para tensarlo y disparó una nueva flecha que volvió a dar en el blanco. No en vano su fama en batallas era legendaria. Sonrió dejando a la vista dos colmillos. Por fin, la batalla había terminado después de mantenerse durante toda la noche. Se alegró por ello, siendo lo que era habría sido un gran problema luchar durante el día en el desierto. Los vampiros no soportaban la luz del sol y luchar sin nada que cubriese las partes de su cuerpo que aún quedaban al aire sería un suicidio. Bajó del carro y se dirigió a su tienda, la más grande y lujosa, correspondiente al rango de general no sin antes anunciar a sus hombres que celebrarían la victoria en cuanto volviesen a palacio. ********************************************************************** –Hola Morgana –dijeron dos voces en cuanto entró en la tienda. –Osiris, Anubis… me alegro de vuestra visita. Debemos planearlo todo cuanto antes. –saludó ella, tratando como iguales a los dos dioses. Y en verdad lo eran. –Sabes que todos los dioses te apoyamos. Pero debemos estar presentes en la ceremonia camuflados como humanos. A algunos sacerdotes no les conviene que tú gobiernes completamente Egipto y trataran de impedirlo por todos los medios. –Los dioses están de mi parte y el visir apoya mis planes, además... no se atreverán a tocarme –sonrió enseñando sus colmillos, un gesto que había adoptado comúnmente desde que fuera convertida –, no siendo una vampira. Me siento segura. Pero cambiemos a temas más alegres. ¿Vendréis a la fiesta que pronto se celebrara? Sera allí donde llevaremos a cabo el plan. Me haría feliz que siendo en parte responsables de mi victoria asistieseis. –Ten por seguro que así será, siempre es bueno conocer a los hombres en su mismo terreno. –Bien. Ordenare que se retiren las tropas y en cuanto lleguemos a palacio me pondré ese odioso vestido de lino banco, ya me las arreglare para que la fiesta se celebre en la noche –miró su pálida piel con interés. –El sol nos va fatal a los vampiros – se lamentó. ********************************************************************** – ¡Sinhué! ¡Padre! –exclamó la princesa eufórica cuando llegó a palacio.–¡Vencimos a los hicsos en la batalla! –Eso es magnifico ¡la fiesta durara días! No creo que importe desatender un poco el trabajo. –Así decae nuestro imperio. Te preocupa más tu diversión que el destino que pueda correr Egipto. Pero eso no durara mucho. Solamente durara hasta esta noche. –Se esforzó por no sonreír mientras lo pensaba. –Iré a prepararme y supervisare que la cena se prepare a la perfección. ********************************************************************** Avanzó por palacio saludado efusivamente a los soldados que pasaron por su camino y dando un simple hola al resto de personas. Al fin, llegó al patio donde se estaba llevando a cabo la preparación de los alimentos. – ¿Cuál es la comida del faraón? –se aseguró de preguntar al visir. Este le señaló uno de los platos que ya se encontraban preparados y sonrió cómplice. ********************************************************************** La noche era más fría de lo común en el lugar y se puso un manto por encima de los hombros y el vestido de lino semitransparente antes de dejar sus aposentos. No se preocupo por nada, el complejo funerario ya estaba completo y Osiris y Anubis asistirían a la ceremonia de coronación disfrazados. Los dioses estaban de su parte, nada podía salir mal, nada. Cogió el cono aromático que un sirviente le tendía y siguió la costumbre de ponérselo en la cabeza. Lamentándose internamente del apestoso olor que tenía para ella. Busco con la mirada a Osiris y Anubis y fue a colocarse junto a ellos. –Me alegro de haberos encontrado a la primera. –Faltaría más. En ese momento los sirvientes se acercaron para servir la comida, por lo que se lavaron las manos con los cuencos que tenían al lado. El visir se acercó a ellos para hablar un rato y acto seguido volvió a irse para vigilar a Sinhué. ********************************************************************** Avanzó por palacio hasta encontrarse con una de las sirvientas personales de su padre. –El faraón tarda mucho en levantarse, ve a ver si le ha pasado algo. Iría yo misma, pero debo ir con mis hombres. –Sí, señora. Iré ahora mismo, no se preocupe por nada. –ella solo se alejó un poco. Preparada para correr y fingir sorpresa y tristeza. Entonces lo oyó, un grito de horror que desgarró sus finos oídos. – ¡Señora! ¡Venga rápido señora! ¡Si aún sigue ahí venga! –echó a correr hacia la habitación de su padre deseando confirmar lo que ya se esperaba. Cuando llegó vio que su padre se encontraba inmóvil, con los ojos inyectados en sangre y que no respiraba. Justo los efectos del veneno. –No… padre no puede estar muerto. –tartamudeó esforzándose por que dos lágrimas corriesen por sus mejillas. –Definitivamente, fingir se te da fatal, Morgana. Pero bueno, el complot se ha completado y podrás devolverle a Egipto todo su esplendor –se dijo a si misma. –Avisare a los embalsamadores, no puedo dejar así su cuerpo. Tu dale la noticia al primer visir, el se encargara del resto. Llevo preparándome años para esta desgracia y pensé estarlo, pero ahora que lo sufro… –Mi señora, no ha de derrumbarse, usted debe gobernar Egipto como Horus viviente. Al pueblo no le va bien que la reina este débil. –Tienes razón, tienes razón. –dijo ella saliendo de la habitación para cumplir con lo que había dicho. – ¿Triste? Estoy deseando saltar de alegría. Anubis, eres el mejor. ********************************************************************** Observó con semblante de piedra como dejaban el sarcófago en el interior de la pirámide, esforzándose por fingir estar destrozada e intentar ser fuerte. Por como la miraban supuso que daba la impresión de ir a derrumbarse de un momento a otro y a llorar junto a las plañideras. Sin embargó ella se erguía portando la doble corona roja y blanca del alto y bajo Egipto y el ankh, símbolo de la vida y la muerte. Una vez más, sonrió. Comenzaba su reinado. Era la nueva Horus viviente. ********************************************************************** – ¿Qué dicen de mi los mortales, Osiris? ¿Les extraña que en los treinta años que han pasado siga teniendo la misma apariencia de cuando tenía veinte? ¿Están contentos con su gobernante? Quiero saber la respuesta a esas preguntas antes de abandonar Egipto, llevo demasiado tiempo gobernando, es hora de que alguien tome el relevo. –Morgana… Los mortales dicen que eres una diosa que ha venido para gobernarles hasta que Egipto recupere todo su esplendor y eso explica cualquier anomalía en ti: tu eterna juventud, tu palidez, tu cabello verdoso, tus ojos rojos y tus colmillos. Preguntas si están contentos con su gobernante, puedo contestarte sinceramente que lo están. Ningún problema a asolado Egipto en tu reinado y el imperio a prosperado. –Me alegro de ello. Partiré mañana, espero que volvamos a vernos pronto. –Ten por seguro que así será. Horus viviente. La vampira se limitó a sofreír. –Para mí siempre llevaras ese titulo. Y lo sabes. –Lo sé, lo sé –rió ella.

El Renacaujo

Había una vez un renacujo muy pequeño, el más pequeño de todos ellos. Siempre estaba haciendo gamberradas, se hacercaba mucho a los patos, llegaba tardísimo a casa, etc.
Los mayores siempre le estaban riñendo, hasta estaban enfadados con el. El renacujo ya harto de que los mayores metieran cizaña...
- ¿Por que no me dejaran en paz? es mi vida y hago lo que quiera. -dijo gritando en medio de la charca, para que todo el mundo lo supiera.
Pasarón unos días y seguían con la misma historia, hasta que fue a quejarse al ayuntamiento para que hecharan fuera de la charca a los mayores, dijo mentiras, verdades... nose sabe como lo hizo pero logró su propósito, hecharlos todos fuera.
Pasarón unas horas y minutos, los mayores ya estaban haciendo susu maletas para marcharse lejos.
El renacuajo contentísimo de que se fueran, fue a jugar con los patos como cada tarde.
-¿como pudistes hechar a los mayores fuera? - dijo el pato un poco fastidiado.
- pues... porque no me dejaban en paz.- dijo el renacujo.
-¿ y no te arrepientes?
-que va! para nada... ja, ja, ja. dijo riendose el renacujo.
- bueno eso lo dirás dentro de 6 semanas...je, je , je...
El renacujo se quedo pensativo, pero no entedió lo que quiso decir el pato.... El pato no paraba de reirse porque dentro de 6 semanas el renacuajo va a ser un sapo igual que susu padres y lo van a echar fuara. FIN

Un mundo diferente

Érase una vez una niña llamada Marta, la pequeña era muy mala, siempre se metía com los demas pero a los que trataba peor era a los extranjeros. Un día por la mañana como otro cualquiera la pequeña Marta se levantaba para ir al colegio, pero espera un momento, no era un día como otro cualquiera, porque la niña no estaba en su casa ni en su cama, era una gran mansión que ella nunca la había visto. La niña se vistió y fue hasta la ventana para ver en que lugar estaba. Cuando vió hacia fuera se dio cuenta que ella nunca habia estado allí. Marta no sabía si preocuparse o alegrarse porque ya no estaba con los pelmas de sus padres ni de sus compañeros pobrechones. Marta salió del cuarto para ver si había alguien y si, había una mujer sentada en una silla, esta se acerco a Marta y le dijo gritando: - a ver marta espavila y vete a limpiar el baño y a ponerme el desayuno en la mesa. La niña sorprendida de que aquella mujer tan estirada supiera su nombre se puso hacer lo que le había dicho la mujer. Marta se dió cuenta de que ya limpiara y preparara toda la casa y que ya no le llamaban marta si no criaducha.Día tras día la pequeña tenía muchisímas ganas de llorar y gritar ya que no paraban de mandarle limpiar aquella casa de cinco pisos.Marta no entendia nada de nada, ni porque estaba en aquel lugar ni porque se había combertido de una niña auna criada, o criaducha como la llamaban allí. Lo que si que entendia y que estaba segura de que probablemente la mandaran para ese lugar por ser tan mala con sus compañeros y con sus padres. cuando ya se estaba haciendo de noche la pequeña no podia parar de pensar en todalas personas a las que ella se había burlado siempre y pensando para ella pidio perdón a todos y mas que a nadie asus padres, asta que se quedo dormida.al día siguiente se desperto muy triste pero cuando se dio de cuenta ya estaba en su casa. La niña fue corriendo en busca de sus padres y cuando los encontro les dio un fuerte abrazo y les prometio que no volcería a ser tan mala como era y que haría todolo que le pidieran sus padres, y así fue, la pequeña ayudaba en casa y nunca más se burlo de nadie que no fuera de su país.

Las dos últimas horas sin clase

A las doce y cuarto, segundo, tercero y cuarto, bajamos para el patio a coger el autobús. En el autobús, me senté al lado de Tamara y delante de Lupe. Las tres hablamos asta llegar al auditorio. En el auditorio, me senté al lado de Tamara y de Rubén.
Durante el musical, me quede dormida porque me aburría un poco.
Cuando desperté no encontré a nadie. Yo me puse muy nerviosa, pero en realidad, era un sueño. Más tarde me desperté y lo que quedaba del musical lo mire todo.
De vez en cuando, nos echábamos unas risas porque contaban algún chiste.
Cuando termino, salimos para fuera y nos pusimos a charlar con nuestros amigos. Al llegar el autobús, nos montamos y subimos para el instituto. Cogimos la mochila y regresamos para casa.