La perezosa ardilla

LA PEQUEÑA ARDILLA

En un bosque de pinos y robles habitaban diferentes animales, entre ellos una familia de ardillas, formada por tres miembros: el padre, la madre y la hija.

Su casa era una endidura en un viejo roble, desde la cual observaban todo el bosque y con las ramas de los árboles quedaban protegidos de las águilas que siempre ls intentaban cazar.

Todos los días al salir el sol, localizaban los frutos más maduros, para eso tenían que recorrer el bosque.

El padre y la madre iban enseñando a la ardilla cuales eran los mejores alimentos para comer y los que necesitaban guardar para el invierno, aunque la ardilla no prestaba atención, ya que prefería quedarse en el bosque jugando.

Al día siguiente, los padres intentaron enseñarle como almacenar la comida para el invierno, pero a ella tampoco le interesaba, pues no creía que fuese tan importante guardar frutos para el invierno, pues los árboles estaban llenos dellos.

Cada día, la ardilla, era más rápida y ágil, así conseguía escapar de sus enemigos.

Poco a poco, fue haciendo amigos como el conejo y el erizo.
Se pasaba los días jugando con ellos, mientras, sus padres recogían y escondían los alimentos.
Se acercaba el invierno y cada día les era más difícil encontrar la comida.
Los padres de la ardilla se pusieron enfermos y no podían salir a buscar la comida, por lo que no le quedó más remedio que ir a buscarla ella. Pero como no le había hecho caso, no sabía donde estaba.
Le pidió ayuda a sus amigos y entre los tres lograron encontrar los alimentos y la ardilla pudo entregarselos a sus padres.
cuando sus padres se recuperaron le explicaron todo de nuevo, pero esta vez la ardilla presto atención a sus padres.