viernes, 4 de julio de 2008

La historia de Lucía

Erase una vez una niña que se llamaba Lucia, que vivía en una pequeña ciudad con sus abuelos y un hermano mayor que se llamaba Juan.

No podían vivir con los padres por que ellos no vivían el la misma ciudad, y no se los podían llevar por que era una ciudad muy mala para unos niños pequeños, el primer día de colegio, estuvieron juntos hasta que Juan hizo amigos, y dejo a Lucía sola. Para que no estuviera triste una profesora le hizo un regalo. Pero Lucía lo que quería no era el regalo, si no hacer amigas para no estar sola.

Al principio a Lucía todo le iba mal, hasta que tocó el timbre, y tubieron que entrar en clase, hay muchas niñas se le presentaron a Lucía, ya estaba contenta por que había hecho muchas amigas.

Cuando llegó a casa de sus abuelos después del colegio les dijo que se lo había pasado muy bien y que había echo muchas amigas. Pero Lucía, aunque no lo reconocía, echaba de menos a sus padres.

Después de un tiempo Juan empezó a cambiar mucho ya no era el hermano que la quería y cuidaba de ella.

Ella estaba preocupada por que el hermano se estaba juntando con gente con la que la vida no le iba a ir bien, ya que estaban metidas en cosas raras y les contestaba mal a sus abuelos.

De lo que no se daban cuenta ni la niña ni los abuelos era de que lo que el quería era irse a vivir con los padres, por eso se comportaba así, para que los abuelos no se quisieran hacer cargo de él.

Lucía, en cambio, estaba muy a gusto con sus nuevas amigas, aunque preocupada por su hermano.

Después de un mes como Juan no cambiaba, Lucía decidió hablar con él de lo que le estaba pasando y fue cuando el le dijo que se iba a vivir con sus padres ala ciudad que ya era mayor.

Lucía se puso muy triste pero si su hermano quería irse tenía que dejarlo marchar.

El finalmente se fue con sus padres, pero de allí a tres años, él tubo que volver a vivir con los abuelos tras un accidente que tubieron sus padres, ninguno de los dos sobrevivió. Lucía que ya tenía catorce años y era la más popular del instituto se sorprendió mucho de que volviera Juan.

Ella había cambiado mucho, ya no era la niña dulce que era antes ahora era una persona superficial y mala estudiante. Se había juntado con malas compañías y tenía un novio muy guapo pero que también era alguien superficial.

Su hermano intentó hacerla cambiar para que volviera a ser la niña que era antes pero en una de sus discusiones ella le dijo:

-Esto es por tu culpa, si soy así es porque tú te fuiste y tube que arreglármelas sola, así que no me des sermones.

Juan y sus abuelos ya no sabían que hacer con ella y decidieron mandarla a un internado.

En el internado tuvo otro novio y hizo amigas pero sobre todo hizo enemigas por su forma de ser era egoísta pero al conocer a este chico cambió algo en ella, se enamoró. Cuando termino en el internado, cuatro años después, ya tenía dieciocho años y era toda una mujer.

Arregló las cosas con su hermano pero nunca lo perdonó del todo.Y con sus abuelos acabo llevándose muy bien.

Después de unos meses se fue a la universidad a vivir con su novio a estudiar Arte Dramático.

Al acabar la carrera la contrataron en una serie que se llamaba "Mucho que contar". Le iba muy bien, en el trabajo, con el novio...

De allí a unos meses se casaron, pero Lucía sufrió una gran desilusión al ver que su hermano no había ido a su boda, ni un mensaje para decirle que no podía ir a la boda.

Así que nada mas acabar la boda, Lucía llamo a Juan para preguntarle que porque no había ido a su casamiento.

Con lo que el le contesto que no había ido porque no creía que su novio Mario fuera el hombre perfecto para ella y que no le gustaba para nada como la trataba delante de la gente.

Lucía a eso le contesto que el era así que eran bromas que en ningún momento le maltrataba.Juan le acabo creyendo, pero no eran mas que excusas de Lucía, si que la maltrataba, no con golpes, si no con palabras feas.

Hasta que un día llego la agresión física, en la que Lucía acabo en el hospital.

El hermano fue a visitarla pero solo para decirle que el se lo había dicho, que sabía que ese chico no era bueno para ella.

Ella le pidió perdón por haberle mentido, pero es que lo quería mucho y el la amenazaba si la dejaba, por lo que ella no podía hacer nada.

Pero Juan le recordó que si podía haber echo algo, pedirle ayuda a él, que para eso eran hermanos.

Cuando Lucía salió del hospital,decidió denunciarlo a la policía, a Mario lo metieron en la cárcel, pero le juro a Lucía que cuando saliera de la cárcel le iba a hacer la vida imposible.

Lucía tenía tanto miedo a que le volviera a hacer lo mismo, que decidió cambiarse de ciudad.

De allí a una semana, Lucía empezó a sentir unos grandes dolores en la barriga, fue al medico, y allí tras hacerle varias pruebas y muchas preguntas, le dijeron que estaba embarazada de tres meses, pero que corría el riesgo de perder al niño.

Entonces Lucía tubo que volver a la ciudad por que no podía estar sola, se fue a vivir con Juan.

De allí a seis meses Lucía tubo una niña a la que llamó Anabel.

Tenía algún problema, pero eran a causa de los maltratos que había sufrido unos meses antes, pero que con el tiempo se irían curando y que no se tenia que preocupar. Pero ella si que se preocupaba, por que no podía salir de la ciudad ya que no podía cuidar a la niña ella sola, y Mario,su marido, estaba a punto de salir de la cárcel y tenía miedo a que le hiciera algo a su hija.

Entonces Juan decidió comprarse una casa en otra ciudad para que no les pasara nada ni a Lucía ni a Anabel.

Tras dos años viviendo allí Juan conoció a una chica, con la cual se caso y se fue a vivir a otra casa.

Lucía no podía impedir que Juan hiciera su vida,por lo que se las tendría que arreglar sola, pero un día en el mercado conoció a un pescadero muy amable y apuesto.

Quedo a cenar con el esa misma noche, pero iba con miedo ya que no quería que le volviera a pasar lo mismo que le había pasado en su anterior matrimonio, el chico se llamaba Manu.

Empezaron a salir, y de allí a seis meses decidieron casarse. Pero ella no podía casarse con el hasta que no se divorciara de Mario, entonces, Lucía tubo que volver a la antigua ciudad y buscar a Mario, pero no fue sola, fue con su novio por que le daba miedo estar con él asolas.

Mario no le quería dar el divorcio, por que no quería que ella fuera feliz.

Pero tras un juicio se lo tubo que dar, aunque Mario le dijo que la buscaría para acabar con ella.

Lucía no le hizo caso, asique se caso.

En el banquete de la boda, Mario estaba allí, Lucía no sabía que hacer, ya que se había reído en su cara cuando Mario le dijo que le iba a hacer la vida imposible para que no fuera feliz con otro.

Al acabar la ceremonia, Lucía, Manu y Anabel se fueron a vivir a otro país, en el cual Mario nunca los iba a encontrar.

Anabel creció pensando que su padre era Manu y que todo estaba bien que no tenían ningún problema. Pero cuando Anabel cumplió los dieciséis su madre decidió hablar con ella y contarle por todo lo que había pasado: la muerte de sus padres, su ex marido mal tratador y por encima de todo decidió contarle quien era su padre, pero la razón por la que quiso contarle todo esto es porque se estaba convirtiendo en un niña caprichosa y superficial. Lo mismo que era Lucía cuando tenía su edad.

Cuando se lo contó Anabel se enfadó muchisimo y dijo que quería conocer a su verdadero padre que tenía derecho a conocerlo. Su madre no sabía que hacer con ella porque no quería que fuera a ver su padre pero por otra parte no podría impedírselo por mucho tiempo, Anabel era muy lista y acabaría encontrando la forma de verle y eso es lo que Lucía más temía. Intentó que entrara en razón pero solo les quedaba una esperanza, su novio , al que Lucía tanto odiaba porque era un niño rico y sin sentimientos, pero el resulto ser diferente realmente quería a Anabel y la convenció para que no fuera a ver a su padre por lo menos por ahora. Pero aunque Anabel no iría a ver a su padre su relación con su madre no iba bien ni siquiera se hablaban. Lucía quería arreglar eso pero no podía y Manu no sabía que hacer, porque Anabel tampoco le hablaba a él.

Pero un día cuando Lucía iba hacía la habitación de Anabel a buscarla para que fuera al instituto, se dio cuenta de que Anabel no estaba en su cuarto, y había una carta encima de la cama.

En la carta ponía: Mama, me voy a buscar a mi padre, no te preocupes por mi, mañana estaré de nuevo en casa.

Lucía no podía creer que Anabel le hubiera mentido de esa manera, así que lo que hizo fue ir a la casa de su exmarido a buscar a su hija.

Pero al llegar a la entrada de la casa Lucía no era capaz de entrar por miedo a que su exmarido le hiciera algo.

Al final decidió entrar pero justo cuando iba a petar en la puerta, Anabel le grito desde fuera que no petara, que no se había atrevido a entrar por lo que le había contado de que la había maltratado.

Lucía se puso feliz, pero no tardo mucho en decirle a Anabel que no volviera a hacer eso, y que iba a estar castigada sin salir de casa un mes.

Cuando estaban dispuestas a irse, escucharon como la puerta de la casa se abría, y un señor les decía que quienes eran.

Cuando Lucía se volteo para ver si era su exmarido, se dio cuenta de que los que vivían en esa casa eran sus abuelos, que Anabel había cogido la dirección de la casa de los abuelos.

Lucía no había reconocido la casa por que estaba muy cambiada y hacía ya muchos años que no se pasaba por allí.

Pero al ver a sus abuelos subió corriendo a darles un abrazo.

Lucía presento a Anabel a sus abuelos, aunque los abuelos ya la conocían pero de cuando ella era un bebe, por lo que Anabel no recordaba.

Al final de la noche Lucía y Anabel volvieron a su casa, y le contaron a Manu y al novio de Anabel que mañana tenían que ir todos juntos a comer a su antigua casa que los había invitado sus abuelos y querían que los conocieran.

Pero cuando llegaron allí Lucía se encontró con su exmarido, y el le dijo que aun le debía una cosa de hacía ya muchos años, y que todavía no lo había olvidado.

Por lo que su marido le dijo que como tocara a su mujer se las iba a ver con él.

Pero Mario cumplió su promesa y cuando Lucía salió a fuera del restaurante a hacer una llamada, Mario la estaba esperando fuera, pero su marido había salido detrás por que no se fiaba de su exmarido.

Menos mal que había salido, por que si no podría haber pasado lo peor.

Mario fue a la cárcel otros 5 años, Lucía no volvió a ese pueblo, y sus abuelos se fueron a vivir con ella.

Después de muchos años por fin era una familia feliz.


Noela Suárez López

Carla Álvarez de la Campa

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